Cuéntame, otra vez, como iba aquella melodía
que hablaba de nosotros dos,
la escribió, el que inventó el adiós..
que hablaba de nosotros dos,
la escribió, el que inventó el adiós..
Corrompible, delicada, sin color, sin sabor, sin aliento, sin nada.. Solo una muñeca, una muñeca, de porcelana, que se rompe con solo mirarla, que se hiere con una palabra, que se quiebra a cada lagrima. Una muñeca, una muñeca, de porcelana..
No hay comentarios:
Publicar un comentario